Uno de los grandes problemas que llevo observando desde hace muchos años es la poca conciencia corporal y lo poco que escuchamos y sentimos nuestro cuerpo.

» Incluso aunque estés callado, tu cuerpo habla»

Es fácil que en alguno de mis entrenamientos diarios observe a la persona que entreno hacer cualquier ejercicio mecánicamente, por que si… sin ser consciente de lo que ocurre en su cuerpo, de lo que siente o de lo que trabaja. Basta con hacerle una simple pregunta… » que estas trabajando ahora? Que sientes? » para que ponga sus sentidos en alerta y comience a sentir su cuerpo.

Una buena conciencia corporal podría evitar muchas lesiones y mejorar nuestro rendimiento. Si prestamos atención en como caminamos, corremos, apoyamos el pie, como nuestras rodillas articulan en el pedaleo, o como es nuestra brazada en la natación, tendremos más control corporal y descubriremos nuestros puntos débiles que podremos tratar de distintas formas. Uno de los deportes que provoca más lesiones es el running, por su alto impacto articular.

También es importante tener presente como trabaja nuestra musculatura. Cuanta gente tiene mas tonificada una pierna que la otra?, es importante aprender a valorar si nuestro cuerpo trabaja de forma armónica y equilibrada, en ambos lados.

No solo nos lesionamos haciendo deporte sino que las tensiones, nos pueden coger por sorpresa también.

Muchos deportistas ya saben como evitar lesiones mediante los planes de entrenamiento, el descanso, la alimentación, el calzado,… pero se trata de prevenir mediante la higiene postural, observarse y rectificar los vicios posturales que día a día vamos adquiriendo.
Escuchar el cuerpo incluyendo días de descanso y controlando cualquier signo de lesión. El dolor es un indicador de lesión real o potencial y si se ignora puede resultar en lesiones más graves. Las malas posturas adquiridas de forma inconsciente pueden provocarnos, como he dicho, lesiones en el futuro y molestias en el presente que se pueden evitar con tan sólo aprender unas pautas a la hora de utilizar nuestro cuerpo y sobre todo SINTIÉNDOLO.